Me desperte una mañana, calida y sin nubes, en muy mala compañia y un intenso dolor cuyo origen no recordaba. Junto a mi una anciana de aspecto descuidado, calva y con bigote me sonreía sospechosamente, así que decidí darle un sonoro, gran montón de patadas en la cara.
Cuál fue mi sorpresa cuando me dijo que te voy a .... comer a besos como sigas mirándome así, zalamero. Ay, mama, qué miedo,esta viejuna me quiere seducir a base de promesas de fornicio y las mas altas perversiones.
Así que tuve que ingeniármelas para escapar de sus garras a través de la ventana roja que había al fondo de la mazmorra, ¿qué hacía yo allí?
Tras un escalofrío, recordé cuál era mi misión, estaba claro que tenía que seguir con ella. Matar a Jesús debía, ella susurraba. Detenerla con mi gran espada y hacer que se callase de una maldita vez decidí que era mejor irme a mi casa para no causar problemas. No la vi seguirme hasta un callejon oscuro donde sería perfecto completar mi gran ritual demoniaco.
Una vez finalizado, me di la vuelta y la asesiné brutalmente. Era algo grotesco y muy sangriento, pero me excitaba el hecho de ponerme a cuatro patas delante de su inmundo cadáver. Sí, estaba enfermo. Cosas peores ví en mi juventud, pero eso es el ritual habitual. Así que continué hacia mi gloria, la aniquilación humana.
El siguiente paso era masacrar a las razas de piel peluda y a todas las feas. Empezaremos por pastores belgas y sus odiadas ovejas para finalmente terminar con
Nota importante: Los pastores belgas es una RAZA de perro, muy parecidos a los pastores alemanes pero en NEGRO, para que así desapareciese el atisbo de racismo del que se quejaba karagos. No sé lo que tienes en contra de los que se dedican al pastoreo en Bélgica ¿qué será lo próximo? ¿taxistas suecos? xDDDD
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